De acuerdo con el informe de la agencia saudí de noticias SPA, el condenado, cuya identificación no fue revelada, recibió la pena por convocar protestas a través de la publicación de postes y vídeos "provocativos" en las redes sociales de Twitter y YouTube. 

 

El Tribunal Penal de Riad, capital del país árabe, afirmó que el activista "burlándose del rey y de la Justicia" incentivaba a las "familias de los encarcelados por razones de seguridad" que celebrasen manifestaciones callejeras. 

 

Asimismo, la persona en cuestión tiene prohibido salir del país por ocho años después de haber acabado la pena, además de que ya no podrá tener ninguna actividad en las redes sociales. 

 

A principio del mes pasado, la Justicia saudí aprobó una nueva ley que califica de acto terrorista y criminaliza cualquier crítica al régimen de Al Saud y los asuntos sociales. Asimismo autoriza a la Policía saudí irrumpir en las viviendas de los manifestantes antigubernamentales, sin orden judicial. 

 

En octubre de 2013, Amnistía Internacional (AI) denunció a Arabia Saudí por “la nueva ola de represión contra la sociedad civil, que ha tenido lugar en los últimos dos años”, periodo en que se desató protestas populares en demanda de un sistema político democrático.